Cuando hablamos de detectives privados nos imaginamos al típico hombre encapuchado, con material de última generación, escondido en un coche. Esto es lo que nos enseñan las películas, y cometemos el gran error de creer que es así.
En la sociedad se suele desprestigiar el trabajo de los detectives privados. Esto se debe a que no nos damos cuenta de lo útil que es contratar un detective privado.
¿Para qué sirve un detective privado?
En las parejas comúnmente se producen separaciones, divorcios, mentiras e infidelidades. Al igual que contratamos psicólogos o abogados, ¿Por qué no contratamos un detective privado?
En muchas ocasiones, las dudas o sospechas que tenemos son una consecuencia de inseguridades propias o del estrés diario. Sin embargo, contratar un detective privado nos ayuda a resolver nuestros medios y resolver la situación de forma inmediata. Lo que nos ayuda a aliviar esas tensiones de pareja que nos provocan discusiones diarias.
En lo que se refiere a personas pérdidas, los detectives privados son de gran ayuda. Existen casos, en que personas adoptadas quieren encontrar a sus padres biológicos, y los hay quienes buscan amigos de su infancia.
Sin embargo, en un caso de desaparición repentina un detective privado, hace un trabajo importantísimo. Ya que, la policía puede encontrarse abrumada de trabajo o muy influenciada por los medios de comunicación.
También existen casos de desaparición que la policía no investiga porque la persona que desaparece puede ser de potencial alto de fuga, y se haya ido por iniciativa propia.
En lo que se refiere al ámbito laboral, los detectives cumplen una función básico y mucho más común de lo que nos gustaría.
Para los empleadores es habitual que existan casos de incumplimiento de contrato, abuso de confianza. E incluso, sospecha de robo, no solo de material o dinero, también puede robarse información confidencial.
Además, existen más casos de los que nos gustaría donde suelen fingirse lesiones o enfermedades, donde pretenden conseguir una indemnización por parte de la empresa.
Por último, una de las mayores ventajas de contratar un detective privado es que podemos garantizarnos discreción y rapidez. Además, de unos mínimos resultados.